¡Hay metal por todas partes a nuestro alrededor! Está en los botones de nuestra ropa, en los brillantes utensilios de cocina que utilizamos y en casi todas las vigas resistentes de las casas que se ven todos los días. En realidad, ¿entiendes las montañas de metal que se fabrican? Todo comienza con una sustancia que la gente llama metal en bruto, que luego se convierte en muchas cosas útiles y hermosas a través de un importante proceso conocido como Fabricación de metales. Las piezas de metal en bruto se traen a nuestro taller y se cortan, doblan y sueldan juntas para formar las formas que hemos diseñado para varios artículos.
Fabricación de metales a medida: ciencia combinada con arte ¡Esta es una parte importante del conjunto de habilidades necesarias para realizar este trabajo! Para saber cómo deben verse las cosas, los trabajadores calificados, llamados "técnicos", deben poder leer planos (o planos) que sean similares a los de una casa o una carretera. Necesitarán máquinas grandes que puedan cortar y dar forma al metal, etc. También deben poder diseñar no solo en máquinas sino a simple vista. Después de todo, esto significa saber hacer cada corte y doblado de manera que se vea nítido.
Una vez que el metal ha sido moldeado con el diseño correcto, se realiza un proceso de acabado especial. El objetivo del acabado del metal es darle un aspecto atractivo. Esto incluye limpiar los bordes ásperos y pulir la superficie del metal. ¡Es como un truco de magia! Una vez terminado, el metal se transforma de una pieza informe a una creación exquisita que puede atrapar sin pestañear y atraer a cualquiera que lo mire con asombro.
El acabado del metal se presenta en muchas formas y, por supuesto, cada tipo tiene diferentes beneficios. Otro procedimiento que se realiza generalmente se llama chorro de arena. Esto implica el uso de granos minúsculos para lijar las partes ásperas y lograr una textura exquisita. Anodizado: este método implica sumergir el metal en productos químicos para crear una capa protectora que dure más. Otro método común para terminar el metal es el recubrimiento en polvo. Este proceso implica un polvo único que se hornea en seco sobre el metal. Esto proporciona un recubrimiento duradero y sin costuras que no solo se ve bien, sino que protege el metal debajo de los daños por impacto.
Sea cual sea el método que se adopte, el factor más crucial para producir una apariencia metálica perfecta es tener cuidado y encerar a fondo. Estos métodos son ampliamente estudiados por los trabajadores del acabado de metales para implementarlos correctamente en las láminas de la fábrica. Trabajan de esta manera, con las orejas atentas y la lengua acerada y resbaladiza; practican para ejecutar estos métodos con fluidez. Esto significa que siempre están trabajando con la mejor pieza de metal posible y su mano de obra es algo en lo que está en juego.
Este artículo presenta procedimientos para transmitir los principios básicos del acabado de metales de una manera que debería ser aplicable a cualquier tipo de trabajo de metal. Ya sea que estemos hablando de una estatua que se alza silenciosa en el parque, un puente resistente que nos permite atravesar un río embravecido o una motocicleta personalizada que debe brillar. LA MENTE DE LOS MOTOCICLISTAS EN LA CARRETERA: EL ACABADO puede acercar aún más su proyecto a la perfección y a dejar atónitos a todos. Si se hace bien, el metal en bruto puede convertirse en este hermoso y brillante objeto que permanece igual durante bastante tiempo y brinda felicidad a quienes lo miran.